Ya va un mes de trabajo ininterrumpido, sólo dos día de descanso en el mes, pero serán tres.
Desde ahí descansaré más seguido y me dedicaré trabajar en mi némesis: La radio.
Jamás pensé que mi voz no modulada, mi rápidez de lenguaje, mi excesivo tratamudeo y muletillas llegarían al dial. Aún asó los asumo como un desafío.
Días atrás -o meses atrás- me reconcilie con una persona que considero especial por su forma de ser: una mujer insegura en búsqueda eterna de esa seguridad pérdida.
Te digo que eres especial, que entiendas que en mi corazón no está quien crees -ojo ella tampoco me gusta, sólo me cae bien- que por ahora mi corazón está sólo y así quiero que siga por un buen tiempo.
A veces la extraño, pero sólo su presencia física. Me duele pensar que a lo mejor era costumbre en vez de amor. Pero eso es harina de otro costal.
A todos los que piensan que me he quedado dormido y a la espera, les contesto que no.
No estoy dormido, sólo tranquilo y sin desesperar.
No estoy esperando que regrese, sólo avanzar mi camino.
Les digo que no se preocupen por eso, ya que para mí ya pasó.
Hace muchos años busqué a un a persona que me acompañara, muchas se unieron a mi camino, poer tal como llegaban se iban. Pasaron los años y cuando me decidí de no buscar más llegó, duró más, pero al final igual se fue. Me enseñó que en materias del amor si te desesperas por buscar jamás encontrarás, sino que debes esperar.
En eso estoy, a la espera. Sé que llegará y sé que nunca se irá.
Chao a todos. Nos vemos en la radio.
jueves, diciembre 29, 2005
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2 comentarios:
Amigo Alejandro López:
No sabes cuanto me alegró esa llamada la noche de Año Nuevo. De fondo, la pegajosa "Gasolina" hacía contonearse a cuanta niñita buena moza hay en La Unión. Estaban además de Carlos, Andrés y la Carla. Todos nos alegramos mucho por tu llamado.
Una de las conversaciones que tuve con mi chico luego de esa noche, fue como cambiaron las cosas alk final de cuentas. Capaz que hasta se nos hayan pasado hartas cosas por andar preocupados de otras, pero sumando o restando, siempre está mejor vivir. Lo mismo contigo. Hasta hace un tiempo me convenciste de que todo estaba pasando, y que sabías que para ti vendrían cosas buenas... espero que lo mantengas ahora. Me alegra mucho que todas tus ganas esten volcadas al bendito oficio este.
Muchos saludos y feliz año nuevo otra vez.
Amigo, yo creo en eso de que nada es para siempre. Ellas siempre se van, algunas van y vuelven. Nosotros podemos hacer lo mismo. Que viva la teoría de la relatividad. El dolor - creo yo- también es relativo. Creo en el amor y el desamor, de los dos se aprende.
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